Como es mi costumbre, os lo reproduczo aquí vinculado al original (hacer clic sobre el título para visitarlo en el periódico Levante El Mercantil Valenciano).
Como siempre este tipo de prensa me produce varias reacciones a la vez. Por un lado pienso que esto es muy mala prensa para nosotros, porque agrupa a todos los niños adoptados en otros paises, les mete en una sola cesta, les señala como defectuosos y - en este caso - ¡un coste adicional para la sociedad! ¡Que horror!
Vamos a ver, quiero preguntar ¿Que pasaría si publicaron un artículo así sobre los niños superdotados - destacando el coste adicional que suponen para Hacienda? Os voy a decir una cosa - lo de ser superdotado puede parecer algo sumamente bueno, pero no siempre lo es. Puede suponer también problemas de adaptación, incluso dificultades psicológicos - y si empiezo a hablar del coste para el sistema educativa para aprovechar la alta inteligencia...
Pero por otro lado, me encuentro en el otro extremo. Leo un artículo así y pienso, es bueno que la sociedad empieza a darse cuenta de que esto - la adopción internacional o la adopción en general - no es exactamente lo mismo que crear una familia de la forma convencional. Es distinto. Pero allí es donde tenemos que trabajar para difundir el mensaje que distinto no quiere decir malo. Claro que nuestros hijos pueden tener alguna necesidad especial (igual que cualquier otro niño) pero esto no quiere decir que no lleven ventaja en muchas otras cosas y que no van a ser ciudadanos muy valiosos para esta sociedad.
Otra cosa positiva que se me ocurre al leer el artículo es que si reportajes así ayudan a que los padres adoptivos se informan sobre cosas que no nos explicaron durante el proceso de adopción, cosas que podrían afectar a sus hijos - esto es bueno. Sin embargo, me temo que este tipo de prensa pone algunos a la defensiva y hace que otros se deseperan. Creo que estas no son las respuestas adecuados.
En vez ponernos a la defensiva, tenemos que preparar nuestra ofensiva - armándonos de información y trabajando para informar a los demás, empezando con los que forman nuestro círculo más íntimo - la familia y los amigos - sacando estos temas para hablarlos. Creo que también tenemos que proporcionar a los medios de comunicación información más equilibrada y positiva. De esta forma trabajamos para cuidar la imagen que la sociedad tiene de nosotros y de nuestros hijos - que esto es muy importante.
El hecho de que nuestros hijos sean adoptados no será nunca un especie de "sentencia" sobre su futuro. Este es sólo un hecho mas en su vida. Con una buena información, nosotros podemos apoyar a nuestros hijos durante cada etapa de su niñez, la adolescencia e incluso cuando sean adultos - como cualquier padre o madre hace para sus hijos.
Cuando hablo de una buena información postadoptiva lo veo como cualquier otra información para padres. ¿Tu niño tiene riesgo para sufrir una anemia? El pediatra te informa sobre lo que tienes que hacer. ¿A la niña no le va muy bien en matemáticas? La profesora te da información e ideas para que le ayudes en casa. El simple hecho de que nos hace falta informarnos - no quiere decir que nuestros hijos tengan problemas, sólo que, como cualquier niño, serán únicos en algunos respectos. Su adopción forma parte de quienes son y les puede afectar.
Así que, ¡a la ofensiva! para informarnos y informar a los demás. Es sencillo. Y ahora, la fuente de estas reflexiones:
Programa de apoyo para niños especiales
El colegio Santa Teresa elabora un proyecto para que la conselleria atienda sus necesidades educativas con los escolares que proceden de la adopción internacional. El colegio Santa Teresa necesita apoyo humano y material.
Maite Ducajú, Valencia
La atención individualiza es necesaria para 45 alumnos de los 196 que tiene matriculados el colegio público Santa Teresa de Valencia, uno de los pocos centros que en la ciudad ofrecen la enseñanza de Primaria en línea en valenciano. Los recursos humanos se quedan insuficientes frente unas demandas peculiares motivadas por los niños con necesidades educativas especiales (25) y por el elevado número de alumnos de este centro que proceden de la adopción internacional (20 escolares). El equipo directivo y el profesorado del Santa Teresa ha resuelto afrontar con decisión la situación para mejorarla por lo que ha presentado a la Conselleria de Educación una amplia propuesta en su Programa Singular de Compensatoria para el curso próximo. Su preocupación es que esta necesidad sea atendida ante el elevado número de solicitudes de otros centros presentadas al departamento autonómico, comentó la jefa de estudios, Maria Isabel Tomàs. «Muchos de estos alumnos son de incorporación tardía por lo que arrastran un retraso escolar. Muestran unas carencias enormes que la escuela que no tenga recursos no pueden atender de ninguna forma. Los problemas más comunes son el déficit de atención y de concentración, psicológicos y afectivos, así como de conducta» explicó a Levante-EMV la jefa de estudios.
Tal como relata, «son personas que rompen con todos los vínculos y que vuelven a crear otros vínculos familiares aquí. Necesitan la seguridad de que no serán devueltos; están muy asustados. En algunos casos, además, desconocen la lengua y se tienen que acoplar a una institución que les suele causar un rechazo que llevan dentro. Todo esto genera estados de ansiedad y unas necesidades educativas que han aparecido ahora» .
El programa presentado a Educación, en su introducción, especifica que la mayoría de estos niños adoptados «no han estado escolarizados en sus países de origen, provienen de orfanatos y no saben lo que es tener un padre o una madre» .
Además, en la escuela, «aumenta su inquietud y les es más difícil la adaptación e integración de las normas o hábitos como podemos comprobar a diario en nuestro colegio. Lo cual repercute negativamente en la marcha de las clases y más, como es nuestro caso, cuando coinciden en el aula con tres o incluso cinco niños procedentes de la adopción internacional» . El proyecto, totalmente novedoso y que supone un «reto educativo» para el colegio, implica a las consellerias de Bienestar Social y de Educación, así como la de Hacienda ya que el coste económico para poder desarrollar el programa está calculado en 1.590 euros.
Los recursos que necesitan son tanto materiales como humanos, aunque ya cuentan con el apoyo del gabinete psicopedagógico de Educación y el asesoramiento técnico de Bienestar Social. Pero, específicamente, requieren para la atención más individualizada a estos alumnos o en grupos pequeños de materiales complementarios así como de talleres.
De los recursos humanos, junto a los 14 profesores en plantilla, les urge una maestra extraplantilla de compensatoria a tiempo completo y la ampliación horaria tanto de la educadora con la que ya cuenta el colegio como de la psicopedagoga.